domingo, 31 de marzo de 2013

Me cargan las historias de superación... me carga eso de que el hombre que no tiene ni brazos, ni piernas ni cabeza haya hecho mucho con su vida mientras yo me quedo atrapada en una labor trivial que para todo el mundo es muy fácil menos para mi.
Estúpidas y sensuales historias de superación.

lunes, 18 de marzo de 2013

Hipocresía

Me acuerdo que una vez, hace tiempo, una mujer con la que ya no me junto, decía "me cargan las mentiras, me carga la gente que miente..." etc. Y yo me encontraba en una opinión dividida entre que su comentario era uuultra cliché y que las mentiras movían el mundo y que por lo tanto no había que juzgarlas tan mal. Por ejemplo, me encantaría que una pareja me dijera alguna vez que considera que soy la mujer mas hermosa del mundo. Yo no le creería, me cagaría de la risa y le preguntaría por quéeee me está diciendo semejante mentira, pero al final la gozaría. Y así es como las mentiras mueven el mundo.
La cosa es que yo pensaba eso, y con el tiempo me di cuenta de que a mi también me apestan las mentiras, que me carga mentir en general porque mi cerebro debe pensar el doble y porque siento como si algo se quebrara en mi interior cuando miento descaradamente, de hecho, ni siquiera soy capaz de fingir que me cae bien una persona a la que odio... en fin. También me cargan las mentiras del mundo, y me cargan porque he conocido individuos que mienten en porciones grotescas.
Por ejemplo, yo tengo que martillar algunas veces, y la sra del primer piso me detuvo en la calle un día y me dijo "si tienes que martillar hazlo no mas, yo no tengo ningun problema, y mientras no escuche mi hijo, yo soy una tumba". Esa mujer ME DETUVO EN LA CALLE para mentirme.
Y bueno, yo comprendo a la gente que mienta y omita cuando NO TIENE OPCION, como cuando el pelotudo de tu jefe te pregunta "le gusta su trabajo de limpiador de baño de discoteques?. O sea, si, una puede decir "es lo que me tocó" y de hecho, esa fue mi respuesta cuando me preguntaron a mi sobre mi aprecio por el trabajo de secretaria, pero yo dije la verdad porque estaba planeando mi discurso de "me quiero ir lo antes posible porque me quiero dedicar a vender bicis". Y creo que otra vez me fuí por las ramas.
La cosa es que hoy tuve que llamar a un caballero para decirle que no podía tener lista su bicicleta para hoy, y me dijo que no importaba, que no había problema... etc.
Y entonces me puse a pensar "y si es como mi vecina del primer piso y en realidad me odia?".

viernes, 8 de marzo de 2013

me gusta juzgar a la gente por cómo escribe porque la gente a mi me ha  juzgado toda la vida por otras cosas. Y porque es divertido y porque me hace sentir que al menos tengo una cosa en la que soy buena... cuando llega alguien a decirme que soy la peor versión de Hitler por eso, me caga toda la onda, porque a nadie le gusta ser la peor versión de Hitler... tal vez al ex-alcalde de providencia le guste, pero a una, que se cree tolerante y abierta de mente, es super desagradable la weá.